Que El Calafate es la ciudad de los glaciares y que su belleza es sublime son dos hechos de los que no cabe duda. Este escenario de la Patagonia Argentina ofrece un entorno que resulta ideal para escaparse unos días y disfrutar del descanso y de la tranquilidad, para relajarse y entregarse a la practica de las diferentes actividades outdoor que te permitirán despejar la cabeza y “congelar” el cansancio y el estrés junto a las gigantescas masas de hielo.
Este enclave paradisíaco no solo ofrece un atractivo como el Perito Moreno, sin dudas uno de los más conocidos y buscados por los turistas, sino también otras opciones en el Parque Nacional Los Glaciares. Algunos menos conocidos que otros, pero que aportan su forma excéntrica y única, dejando como resultado una belleza singular. Entre ellos, el Bolado. “Descubriendo el Glaciar Bolado” es la misión de las próximas líneas, orientadas a mostrar otra de las facetas ocultas de una ciudad atrapante como El Calafate.
Este glaciar está relacionado con la Bahía Onelli mediante uno de los ríos más cortos del mundo, con tan solo 800 metros. Esta bahía es la que separar al brazo Upsala del lago que lleva su nombre. Antes, era conocido como el Puesto de las Vacas, ya que iban a pastar allí, y en la actualidad aún pueden observarse merodeando estos animales, que se dirigen hacia los bosques de los alrededores.
Como la Bahía es “cerrada”, se la considera un sitio ideal para sentirse preso de la naturaleza, olvidándose de todo. Incluso, una de las cosas que realizan los turistas es un picnic en este escenario de absoluta hermosura, aprovechando para tomarse un descanso del recorrido que iniciaron hace algunas horas atrás.
El glaciar Bolado presenta una forma singular, tipo U y esto le aporta un “aire” especial, que termina por definir su belleza. Nos regala, para nuestra admiración, sus 18 kilómetros cuadrados.
Asimismo, en la Bahía también se encuentra el Glaciar Agassiz, de 31 kilómetros cuadrados. Entre ambos, es posible participar de otra de las propuestas turísticas de la zona: un paseo por los lagos para admirar lo magnifico de esta porción de la naturaleza.
Otro de los glaciares que también te regalará su presencia es el Heim y Onelli, componiendo así un conjunto natural perfecto.
Entonces, si hay algo que tiene que haberte quedado claro después de leer esta nota, para cuando viajes a El Calafate, es que su identificación como la ciudad de los glaciares es correcta y que no debes conformarte con explorar sólo los “más conocidos”, sino también ir en búsqueda de estos otros glaciares que también te cautivarán.
Para estos recorridos, por supuesto no debes olvidarte de llevar abrigo, así como calzado adecuado, ya que hay zonas en donde es muy resbaloso.
Y luego de este paseo, podrás disfrutar de algunas actividades típicas para concluir la jornada: disfrutar de alguna infusión caliente, con tortas realizadas con frutos del lugar. Hay varios sitios en donde hacerlo y uno de ellos es La Usina, que también te ofrece el recorrido al glaciar Bolado.
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